Reparaciones más comunes en furgonetas camper y cómo arreglarlas

⇨ Las furgonetas se estacionan frecuentemente en campamentos fijos prolongadas semanas, dejando la batería susceptible de agotarse. Carga la batería de tu furgoneta haciéndola funcionar durante una hora cada 7-10 días y evitarás fallos inesperado.

⇨ Además de vigilar la carga de la batería, es importante tomar nota de las condiciones en las que almacenas tu furgoneta. La temperatura puede afectar el rendimiento y la duración de la batería.

⇨ Hay varios tipos diferentes de baterías que se utilizan en las furgonetas y vehículos recreativos: baterías de células de gel, baterías de plomo, baterías de plomo inundadas, baterías de células húmedas y baterías AGM, por nombrar sólo algunas. Familiarízate con el tipo de batería de tu vehículo recreativo para un mantenimiento adecuado. Y en caso de que necesites ayuda, llévala a un mecánico para que te indique el tipo de batería que tienes y comienza a mimarlas.

⇨ Los terminales de la batería deben mantenerse limpios y revisarse para detectar signos de corrosión.

⇨ Una cosa fácil de recordar para ayudarte a evitar los fallos eléctricos es no sobrecargar nunca tus enchufes. Al igual que en su casa, si tiene la tostadora, el secador de pelo y la licuadora funcionando al mismo tiempo, es probable que se funda un fusible. Limita la cantidad de energía que utilizas de los dispositivos externos.

⇨ Revisa todas las conexiones eléctricas y las baterías como indicamos arriba, ya que es nuestra fuente de electricidad tanto para el uso interno de la furgoneta, como para el arranque del motor. Se recomienda que esta revisión se realice al menos una vez al mes.

⇨ Mantén tus neumáticos bien hinchados. La presión de los neumáticos puede cambiar drásticamente en tu furgoneta o autocaravana, por varias razones; como son los cambios de temperatura, peso de pasajeros y equipaje o cambios de terreno. Un error común es inflar demasiado los neumáticos. Familiarízate con la precisión justa que necesitan tus neumáticos. Este número se puede encontrar en la parte interior de los neumático o en una placa.

⇨ Fíjate una regla general para revisar tus neumáticos, por ejemplo cada vez que llenes el tanque de combustible. Esto puede ayudarte a evitar que se reviente un neumático, lo que puede terminar siendo una reparación costosa y un gran inconveniente.

⇨ Gira tus neumáticos regularmente para dispersar adecuadamente el desgaste que tengan.

⇨ En el desafortunado y molesto escenario de que te encuentres con un reventón de neumáticos, trata de no pisar los frenos. Cada parte interna tuya puede querer detener el vehículo tan rápido como sea posible, sin embargo, esto es muy peligroso. La forma más segura de manejar un reventón de neumáticos, es salir tranquilamente al costado del camino hasta que se detenga gradualmente. Las fuerzas laterales harán que tu vehículo quiera volcar cuando pises el freno. Al acelerar suavemente, puede mantenerse erguido hasta que puedas detenerla finalmente. No pierdas los nervios nunca en ésta situación, que tarde o temprano nos pasa a todos.

⇨ Drena los tres tanques después de cada viaje (tanque de aguas grises, tanque de aguas negras y tanque de aguas limpias). Cuando no se realiza el vaciado de los tanques, se suele producir una acumulación de materia orgánica además de moho y bacterias, que tienen como consecuencia una reparación costosa. Además, si las temperaturas bajan, el tanque puede congelarse o agrietarse, lo que requerirá que lo reemplaces.

⇨ Si encuentra que tus grifos tienen fugas, la goma debe ser reemplazada lo antes posible. Como regla general, reemplaza los sellos de goma y los asientos de las válvulas cada dos años.

⇨ Tener en cuenta la cantidad de papel higiénico que se utiliza en el retrete de la furgoneta o autocaravana, puede ayudar a evitar el problema común de la obstrucción o atascos. Los inodoros construidos, suelen tener mecanismos de «trampilla» que eliminan los residuos. Demasiado papel higiénico obstruirá esta parte corrediza.

⇨ Vigila las líneas de suministro de agua. En los modelos más antiguos, estas líneas están comúnmente hechas de cobre. En las furgonetas camper o autocaravanas más nuevas, encontrarás que están hechas de goma. Por lo general, no son difíciles de reemplazar. Si eres particularmente hábil, puedes encontrar piezas de repuesto y sustituirlas tú mismo. Si no estás seguro, es mejor dejar esto en manos de un mecánico profesional.

⇨ Después de varios años, es probable que tenga que reemplazar el inodoro de tu casa rodante. Normalmente cuestan entre 100 y 300 euros. Asegúrate de medir las dimensiones y de que tu nuevo inodoro se pueda conectar correctamente a la válvula ya existente.

⇨ Los calentadores de agua también tendrán que ser reemplazados eventualmente. Dependiendo de la edad de tu furgoneta o autocaravana, tendrás que reemplazar el calentador por uno de gas (para los modelos más antiguos) o uno eléctrico (modelos más nuevos). Una vez más, asegúrate de medir las dimensiones antes de hacer el pedido y de que la capacidad de carga es la que requiere tu vehículo.

⇨ Los techos de las casas rodantes tienden a estar hechos de goma, aluminio, fibra de vidrio o vinilo. La limpieza adecuada del techo de tu vehículo específico, necesitará su tipo de material en concreto. Hay productos incompatibles para según que materiales, y ésto no quiere decir que tengas que gastarte mucho dinero buscando el mejor producto. Tan sólo revisa el material de construcción de tu furgoneta y cuida comprar un producto compatible.

⇨ Inspecciona tu vehículo por si hay fugas de sellado. El calafateo anual del techo es necesario para evitar un reemplazo prematuro del techo. El calafateo del techo es un proceso bastante simple. Los agentes selladores pueden comprarse online y aplicarse/secarse en un día más o menos.

⇨ Piensa en comprar una cubierta para la furgoneta o autocaravan. Esto puede ayudar a evitar reparaciones innecesarias del techo, protegiendo tu vehículo de los daños causados por el clima y el sol.